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Civislend. Invertir vs ahorrar.

En España seguimos pensando que invertir es de ricos…

El reto:

Hacemos grandes cosas, pero también otro tipo de trabajos no tan grandes. Como el que nos pidió Civislend, una empresa de crowdfunding y crowlending inmobiliario. ¡Toma ya! Bromas aparte, una startup muy joven con gente que tenía las cosas muy claras y con los que conectamos desde el primer minuto en el ascensor: eran nuestros vecinos de edificio. Como las normas de buena vecindad dicen que hay que ayudarse mutuamente en caso de necesidad o emergencia, atendimos su llamada para montar una campaña OOH que diera a conocer su marca y su actividad. 

El desarrollo:

Que una empresa que se acaba de montar y esté peleando por sus primeros ingresos se arriesgue a lanzar una campaña de publicidad en los autobuses de Madrid demuestra mucha seguridad en sí mismos y determinación. Eso nos gustó, y hasta nos recordó a nuestros primeros momentos veinte años atrás. Por eso empatizamos bien, y además eran vecinos…

Querían algo impactante y memorable, necesitaban mucha visibilidad porque es un mercado con una competencia feroz. Así que recurrimos a algo que nunca nos falla: el refranero español. Hicimos una serie de claims transmitiendo a las audiencias objetivo que cualquiera puede invertir en el sector inmobiliario (conociendo los riesgos, claro). Y es que en España tenemos la creencia errónea de que solo los ricos pueden invertir. Total, que quisimos transmitir que este tipo de plataformas que llevan funcionando en EEUU desde hace 50 años también pueden funcionar aquí y servir como vehículo de inversión desde 250 euros. 

A los españoles se nos da bien ahorrar, pero no nos gusta mucho invertir. Y tratar de cambiar esa realidad y de democratizar la inversión es lo que nos llevó a adaptar algunos refranes y transformarlos en mensajes potentes. La sabiduría popular no suele equivocarse. 

La campaña cumplió sus objetivos y despertó la atención de muchos potenciales inversores que quisieron conocer mejor a Civislend, incluso en mitad de otro verano caluroso en la capital. Gracias a eso, estuvimos mucho tiempo más saludándonos en el ascensor.

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